En el siglo XV L´illa de maians fue unida a la península con una espigón al igual que otra isla más pequeña de la cual desconozco el nombre si es que algún día lo tuvo que se encontraba más o menos a la altura de la Ciutadella, el trozo de playa entre las dos islas pasó a utilizarse como nuevo puerto natural y fue bautizado como Port de Alfons V.
El permiso para construir el nuevo puerto artificial llegó el 8 de diciembre de 1438, por orden de Alfons V el Magnànim.
Diez años después de comenzar las obras, fueron paralizadas a causa de los fuertes temporales que destruyeron todo lo que se había construido hasta entonces y no fue hasta 1477 que se reanudaron las obras de construcción bajo el reinado de Joan II.
Una vez finalizado el puerto, en el tramo final se construyó el faro que guiaba las naves a buen puerto.
Terminado el puerto artificial los sedimentos del río Besós se fueron depositando en el lado norte del espigón, haciendo desaparecer la isla de Mayans, ganando así terreno al mar, creando una península. En 1714 con la entrada de las tropas de Felipe V en la ciudad, los pescadores del Regomir fueron obligados a derribar sus casas con sus propias manos para construir encima la ciudadela militar. Los pescadores al ser expulsados de sus casas decidieron establecerse en la nueva tierra ganada al mar. En 1753 se colocó la primera piedra del nuevo barrio proyectado por el ingeniero militar Juan Martín Cermeño. El nuevo barrio llamado La Barceloneta fue diseñado como un campamento militar, con las manzanas de viviendas rectangulares como los barracones de los soldados. Las casas eran viviendas unifamiliares de planta y piso que eran rematadas con el característico frontón triangular de la fachada. La mayoría de estas viviendas disponían de un sótano donde se guardaba la sal para conservar el pescado y los arreos de pesca. La Torre del Reloj fue construida en 1772, Inicialmente era un faro y un baluarte donde se encontraba el despacho de pasaportes y la comandancia de marina, pero, a causa del crecimiento del puerto, perdió su función y en 1904 se decidió conservarlo añadiendo un reloj en cada cara. También tiene el honor de ser un punto geodésico donde Pierre F. Méchain, tomó las últimas medidas que dieron lugar al nacimiento del sistema métrico decimal. El último punto desde donde se trazó el triangulo para tomar la última medida del meridiano de París, que va de Dunkerque a Barcelona. Creando una línea imaginaria que sale de la torre del reloj, la línea pasa por la avenida del Paral.lel y llega a la plaza de España, desde allí otra línea va por la Gran Vía hacia la avenida Meridiana y desde allí otra que vuelve a la torre cerrando el último triangulo con el que se consiguió saber las medidas exactas del globo terráqueo.
De esta manera podemos decir con exactitud y sin equivocarnos que gracias al espigón y a la torre del reloj nació uno de los barrios más emblematicos como es la Barceloneta y también el sistema métrico decimal gracias al cual podemos medir las cosas con la ayuda del metro, olvidándonos así de la Ferrisa que colgaba de la puerta de la muralla, en la calle hoy llamada Portaferrisa.

05 CONST PUERTO Y NACIMIENTO BARRIO (MAYO2018)